Con un frosting en la manga: Sticky toffee pudding

Buenos y nublados días!!!!

En Alicante no estamos acostumbrados a días grises con lloviznas intermitentes, así que mientras dure toca sofá y peli u hornear. Que llueva y mucho para que se rieguen las plantitas y no solo para ensuciarme el coche!

Hoy les traigo una receta que vi hacer a Jamie Oliver, del que me declaro fan total, la he adaptado a los productos que tenemos en España y "modestamente" manifiesto que ha quedado de muerte.

He reemplazado el azúcar moscovado o mascabado por azúcar moreno con miel de caña y los dátiles medjoul por dátiles comunes, ya que son muy muy caros (entiendo que serán una exquisitez ya que un abandeja de 200g cuesta más de 6€, pero es un lujo que podemos sustituir sin ningún miedo a que el pudding pierda sabor).

Ingredientes:

Para el pudding:

450g de dátiles sin hueso

4 bolsitas de té de bergamota

300ml de agua hirviendo

1 cucharadita de canela

1 cucharadita de nuez moscada molida

70g de mantequilla a temperatura ambiente

280g de azúcar moreno

60g de miel de caña o melaza

4 huevos

340g de harina

1 cucharadita de bicarbonato de soda.

Para la salsa Toffee:

200g azúcar moreno

50g de miel de caña o melaza

250g de mantequilla

50ml de ron o brandy

300ml de nata

Preparación paso a paso

Precalentar el horno a 180º

Enmantecar y enharinar un molde para pudding, puede utilizarse un molde de bund cake o una flanera, tiene que tener unas medidas aproximadas 22cm de diámetro y 14cm de alto.

Echar el agua caliente a las bolsitas de té y dejar reposar 3 1/2 minutos.

Poner los dátiles en el vaso del robot de cocina. Una vez que el té haya reposado, retirar las bolsitas y verter junto con los dátiles, agregar la canela y la nuez moscada y dejar reposar 10 minutos. Pasado este tiempo triturar hasta obtener una crema.

En un bowl batir la mantequilla junto con el azúcar moreno y la miel de caña hasta obtener una mezcla homogénea.

Agregar los huevos de a uno por vez, sin dejar de batir.

Incorporamos la harina tamizada junto con el bicarbonato de soda, batimos a una velocidad baja. En este paso acostumbro a cambiar la batidora por una espátula y mezclo a mano.

Por último incorporar la crema de dátiles y continuar mezclando suavemente.

Volcar la masa en el molde y hornear a 180º durante unos 45 a 50 minutos aproximadamente. Dependerá de vuestro horno.

Una vez pasado el tiempo, comprobaremos con la ayuda de un palillo o cuchillo si está hecho, pinchando el bizcocho, si el palillo sale limpio, es decir sin tener adherido nada de la masa, el pudding ya estará listo.

Dejar enfriar.

Ahora toca la salsa Toffee, os prevengo que es adictiva ;)

En una cazo pondremos a calentar a fuego medio el azúcar junto con la mantequilla y la miel de caña. Cuando la mantequilla se haya fundido agregaremos el brandy o el ron, lo que más os guste, y flambear.

Flambear es quemar el alcohol, ni más ni menos, cuidado de no incendiar la cocina!!!:) Echamos el brandy y con la ayuda de un mechero encendemos dentro del cazo y aparecerán las llamas azules, que indican que el alcohol se está quemando, se apaga solo. Cuidado con la campana extractora!!!

Cuando el fuego se haya apagado agregaremos la nata, sin remover ni mezclar, cuando aparezcan burbujitas en la superficie apagar el fuego porque la salsa estará lista!!!!

Ya solo nos queda preparar para servir.

Desmoldar el pudding y con la ayuda de un pincel de cocina, pintar toda la superficie con la salsa. De esta manera lograremos darle al bizcocho una película dulce y brillante.

Echar parte de la salsa en el agujero del centro y el resto en una salsera.

A disfrutar!!!!

Trucos

Aprovechando el regalo de una amiga que conoce mi pasión por el té, utilicé el de Harrods Nº42 Earl Grey. En los supers podéis comprar el de Twinings Earl Grey o Lady Grey.

Como os he comentado al principio, por dónde vivo no conseguí azúcar moscovado, así que se me ocurrió crearlo con azúcar moreno y miel de caña o melaza.

Y si os parece bien y está al alcance de vuestro bolsillo, comprar los dátiles de medjoul, que seguro serán muy ricos, los que habían en el super tenían una pinta increíble y eran importados de Israel.

Si no disponéis de un molde Savarín, es decir, con un agujero en el centro, utilizar cualquier molde para bizcochos.

Que el flambeado no os eche para atrás, es muy fácil, tomar las precauciones necesarias, como retirar el cazo de debajo de la campana, etc. y si así os sigue dando miedo, no dudéis en dejarme la consulta, os ayudaré muy gustosa. Y si sucede cualquier accidente... siempre quedarán los bomberos!!! Espero que os salven los buenorros y no los que vienen a hacer los simulacros a la oficina. :)